Iniciativa Artemisa, creada por un grupo de mujeres, busca brindar un apoyo legal en el ámbito laboral de la industria audiovisual para evitar casos de discriminación, exclusión y violencia de género.
Ciudad de México, 26 de noviembre (SinEmbargo).– Ante la ausencia de normas en la industria audiovisual que protejan a las mujeres de discriminación o violencia de género, nace la Iniciativa Artemisa. Una herramienta conceptual que permitirá brindar apoyo con giros legales y formativos a víctimas y como forma de prevención en México y toda América Latina también.
Esta iniciativa, que se presentó formalmente este jueves en el marco del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), nació a mediados de este año gracias al esfuerzo de un grupo de mujeres dentro de la industria.
Karla Bukantz, vocera de Iniciativa Artemisa y productora, explica para SinEmbargo, que este movimiento surge a partir de #Civilas, un grupo de WhatsApp de mujeres dentro del medio de la cultura y el cine:
"Nos encontramos con que había una urgencia por regular las relaciones laborales en la industria audiovisual. En el grupo está una abogada, y con su asesoría hicimos una serie de tres grupos de cláusulas que son de cero tolerancia contra el acoso, la violencia y la discriminación. También elaboramos un apartado que tiene que ver con la coordinación de intimidad que vemos en la películas cuando en los guiones son de corte sexual, entonces hay que tener a una persona que esté coordinando que las cosas se hagan bien y con una serie de reglas", detalla.
Y es que hasta los números muestran la urgencia por crear espacios libres de violencia. De acuerdo con un estudio realizado por Paulina Villegas, abogada y asesora legal de la Iniciativa, se destaca que el 70 por ciento de las mujeres que trabajan dentro de la industria audiovisual se han enfrentado a acoso u hostigamiento sexual.
Además, el 27 por ciento de los cosos no son reportados, otro 22 por ciento no son denunciados por medio a represalias, y un 30 por ciento decide no hacerlo porque considera que no es importante o es algo "normal".
Bukantz explica que estas conductas, que pueden ir desde abrazos o besos inapropiados, comentarios o bromas sexuales, suelen ser normalizados ante la falta de conocimiento, y exponer estos actos pueden poner alerta a más víctimas.
"Hemos normalizado el comportamiento del tipo sexual. Conductas que parecen muy simples pero que cuando las analizas te das cuenta que eso no debería suceder".
Y remarca, que estas conductas no exentan a ningún sexo.
"Nuestra intención primordial es crear espacios de trabajo que sean seguros para todes, porque esto primordialmente sí nos pasa a las mujeres, pero claro, también hay un acoso hacia los hombres".
Las cláusulas que proporciona Iniciativa Artemisa (disponibles en su Pagina Web: www.iniciativa-artemisa.org) se dividen en tres: Violencia sexual, Discriminación y Manejo de Intimidad. Cada una es un desplegado de reglamentos que pueden ser descargados de forma gratuita y usados ante la falta de contratos que regulen estas conductas en los espacios de trabajo.
"Nosotros partimos del principio de que la relación laboral específicamente estuviera regulada con estos instrumentos que también, eventualmente, son herramientas de tipo formativo primordialmente pensadas para la producción audiovisual, pero también podrían incorporarse a otros rubros de la producción como la exhibición de los festivales, en las escuelas, etc.".
Karla Bukantz urge por cultivar la cultura de la denuncia. Señala que países, sobre todo de América Latina, suele desestimar este recurso porque no ve atención en las demandas, pero asegura que sólo así se generará un cambio para lograr un espacio de trabajo libre de violencia y animando, a la vez, a que más víctimas se atrevan a hablar.
"No normalicemos y no minimicemos. […] Es muy importante que sí hagamos una cultura de la denuncia, anónima o no, esos cuestionamientos son individuales, peor sí es importante acercarse a la producción, a quienes manejan el festival, a las direcciones de las escuelas, es muy importante decir 'está pasando esto'. No pude ser un asunto de suposición, no puede ser de rumores, tiene que haber una denuncia para que entonces esto pueda ir cambiando".
"En este país, específicamente hablando, tenemos un asunto con la cultura de la denuncia, creemos que denunciar no sirve de nada, pero no va llegar tampoco a ningún lado tampoco si no lo hacemos".